lunes, 2 de mayo de 2011

Heimdal

Heimdal es el dios guardián en la mitología nórdica. Es hijo de Odín y de nueve gigantas que lo nutrieron con sangre de jabalí. Poseía una vista aguda, un fino oído y podía estar sin dormir varios días. Pero en cambio, no podía hablar. Su percepción era tan extraordinaria que oía crecer la hierba, razón por la cual se le designó guardián de la morada de los dioses, Asgard, y del Bifrost, el arco iris que hace de puente hasta ella. Según la mitología Nórdica, con un cuerno llamado Gjallarhorn, que Odín le regaló, anunciará el combate entre dioses y gigantes, después del cual sobrevendrá el fin del mundo, el Ragnarök. Heimdal intervendrá en la lucha, en la que será muerto por el dios maligno Loki. Aunque será símbolo de Poder porque será el último dios en caer en el Ragnarok . Una tradición nórdica dice que descendió a la tierra y engendró en tres mujeres los tres linajes príncipes, súbditos y siervos. Origen e Historia de Heimdall En el transcurso de un paseo en la orilla del mar, Odín vio una vez a nueve bellas gigantas, las doncellas de las olas, Gialp, Greip, Egia, Augeia, Ulfrun, Aurgiafa, Sindur, Atla e Iarnsaxa, profundamente dormidas en las blancas arenas. El dios del cielo quedó tan enamorado de las hermosas criaturas que, como relatan los Eddas , se desposó con las nueve y se combinaron, en el mismo momento, para traer al mundo un hijo que recibió el nombre de Heimdall. Las nueve madres procedieron a alimentar a su bebé con la fuerza de la tierra, la humedad del amor y el calor del Sol, una dieta que demostró ser tan fortalecedora que el nuevo dios adquirió un crecimiento completo en un espacio de tiempo increíblemente corto y corrió a unirse a su padre en Asgard. Encontró a los dioses observando con orgullo el arco iris del puente Bifröst, el cual acababan de construir con fuego, aire y agua, los tres materiales que aún pueden verse en este extenso arco, donde brillan los tres colores principales significativos de estos elementos: el rojo representando al fuego, el azul al aire y el verde a las frescas profundidades del mar. Heimdall tiene otros nombres, entre los cuales encontramos los de Hallinskide e Irmin, pues a veces ocupaba el lugar de Odín y era identificado con aquel dios, al igual que con otros dioses de espada, Er, Heru, Cheru y Tyr, que destacaban todos por sus relucientes armas. Él, sin embargo, es más conocido generalmente como el custodio del arco iris y dios del cielo y de las fértiles lluvias y rocíos, que traen buenos tiempos a la Tierra. Heimdall compartía además con Bragi el honor de darle la bienvenida a los héroes en Valhalla, el paraíso de los guerreros, y, bajo el nombre de Riger, era considerado como el señor divino de varias clases sociales que componen la raza humana.